En el corazón de la bulliciosa ciudad de Nueva York, Café Dulce Encanto ha sido un ícono gastronómico durante más de 60 años. Fundado en 1960 por la apasionada amante del café, Lucía Rodríguez, este encantador rincón se convirtió rápidamente en un refugio para los neoyorquinos en busca de momentos dulces y memorables.
Con su inconfundible aroma a café recién molido y la calidez de su decoración vintage, Café Dulce Encanto ha acogido a generaciones de clientes. Desde los artistas bohemios de los años 60 hasta los ejecutivos apurados de la actualidad, nuestro café ha sido testigo de historias, reuniones y risas que han dejado una huella indeleble en la esencia de esta ciudad vibrante.
Nuestro compromiso con la calidad y la pasión por los sabores auténticos han sido el sello distintivo a lo largo de los años. Desde los primeros días, nos hemos esforzado por ofrecer una amplia variedad de cafés artesanales, postres caseros y delicias gastronómicas que satisfacen los paladares más exigentes.
Café Dulce Encanto no solo es un lugar para disfrutar del mejor café de la ciudad, sino también un espacio donde las conversaciones fluyen con naturalidad, donde las ideas se nutren y donde cada visita se convierte en un dulce recuerdo.
Únete a la tradición y vive la experiencia de Café Dulce Encanto, un clásico atemporal que ha tejido parte de la historia de Nueva York con cada sorbo y cada bocado.